[Imagen: "Casa de Monsieur Hulot" vía © pietschreuders]
EL ALAMBICADO recorrido que Monsieur Hulot realiza cada vez que accede a su vivienda es una de las escenas inolvidables de 'Mi tío' (1958) de Jacques Tati. Un deambular por un conjunto de escaleras, pasillos y pasarelas —diseñado ex proceso para la película en St Maur-des-Fossés, París, por Henri Schmitt—, prolongación de lo público exterior en el interior del edificio. Espacios intermedios que facilitan la creación de vínculos entre los vecinos de manera informal. A la vez que simbolizan la antítesis caricaturesca de Villa Arpel. La casa unifamiliar rodeada por una valla, pensada para acceder en automóvil, donde viven aislados el sobrino de Hulot y sus padres. Vivienda que en la película encarna, por contraposición, un mal entendido concepto de progreso basado exclusivamente en la técnica y la eficacia, pero que olvida la necesidad vital de relación del ser humano. Y que es esta interacción la que finalmente construye los lugares verdaderos; los que no se encuentran en los mapas... o en los planos, pero que disfrutamos a diario.«It is not down on any map; true places never are.»
— Herman Melville
1 comentarios:
Maravilloso, aunque mi preferida es y continuará siendo Les Vacances de Monsieur Hulot. Incluso viajé a Saint-Marc-sur-Mer. Gracias por la fotografia, no la había visto. Me la bajo :)
Publicar un comentario